Estoy leyendo un reportaje en la revista Mérida Viva de este mes con una entrevista al maestro Paco Marín en la portada. Fue escrita por Salvador Lemis. El texto, sinceramente, es emancipador en su lenguaje (la gente que no es de teatro tiene que hacer un esfuerzo para entenderlo) pero sinceramente, sino se escribe así ahora... ¿cuando? y en ¿dónde?
Ante sala para mi reflexión central, que se hace clara en el texto al citar textualmente:
"¿Para quién trabajamos los teatristas en Mérida? En primer lugar ara los propios colegas de las tablas. Pues se resiente cada ausencia y se alegra la mirada cuando son convocados al acto y ahí están en sexta fila, juzgando aceptando. En segundo lugar para los desprevenidos, que llegan al pasar por el tratro. Y entran a la sala, deslumbrados po la gratuidad del evento sin arrepentirse de haber entrado. Quizá. Y también se trabaja para determinados organismo y figuras, cuyo trabajo sociocultural así se los exige"
Aunque se aclara que no es un estudio sociologico sobre la tipología que el teatrista tiene de su público, si me salta la reflexión ¿Para quién trabaja el teatrista de yucatán?
Es una pregunta a nivel personal que en la sinceridad de la mesa se responde de la siguiente manera: Para los amigos, para papá y mamá, para los maestros, para la escuela y de vez en cuando para alguna institución. Concuerdo con su respuesta maestro Marin.
Pero me aterra pensar que nos estamos quedando encerrados en nuestra torre de marfil. Para quién diantres trabajamos ¿para hacer el arte por el arte? ¿para la clase intelectualoide? ¿para hacer las grandes masas? ¿para nuestros amigos, papá y mamá?
Todos estos público son respetables y tienen su grado de dificultad. Pero a nivel de comunicador social, de licenciado preocupado por la sociedad... ¿no deberíamos trabajar para el público?, pero para qué vamos a trabajar para alguién que nos desprecia y no paga la entrada del boleto... ¿trabajar para nuestros amigos y hacer arte por el arte? way, no lo sé, como que es quedarnos dormidos en nuestros laureles.
Soy de dar concluciones, yo quiero trabajar para la gente... creo que al final de cuentas debemos de trabajar teniendo fe en lo que queremos, darle voz a la gente que tenie algo qe decir, que se identifique con nuestro trabajo.
Pero el deseo de producir y dar a conocer nuestros demonios y fuerzas internas es más fuerte.
Tenemos que buscar entonces nuestro equilibrio entre lo que queremos y entre la sociedad, esa es mi premisa básica para trabaja ahora.
Ante sala para mi reflexión central, que se hace clara en el texto al citar textualmente:
"¿Para quién trabajamos los teatristas en Mérida? En primer lugar ara los propios colegas de las tablas. Pues se resiente cada ausencia y se alegra la mirada cuando son convocados al acto y ahí están en sexta fila, juzgando aceptando. En segundo lugar para los desprevenidos, que llegan al pasar por el tratro. Y entran a la sala, deslumbrados po la gratuidad del evento sin arrepentirse de haber entrado. Quizá. Y también se trabaja para determinados organismo y figuras, cuyo trabajo sociocultural así se los exige"
Aunque se aclara que no es un estudio sociologico sobre la tipología que el teatrista tiene de su público, si me salta la reflexión ¿Para quién trabaja el teatrista de yucatán?
Es una pregunta a nivel personal que en la sinceridad de la mesa se responde de la siguiente manera: Para los amigos, para papá y mamá, para los maestros, para la escuela y de vez en cuando para alguna institución. Concuerdo con su respuesta maestro Marin.
Pero me aterra pensar que nos estamos quedando encerrados en nuestra torre de marfil. Para quién diantres trabajamos ¿para hacer el arte por el arte? ¿para la clase intelectualoide? ¿para hacer las grandes masas? ¿para nuestros amigos, papá y mamá?
Todos estos público son respetables y tienen su grado de dificultad. Pero a nivel de comunicador social, de licenciado preocupado por la sociedad... ¿no deberíamos trabajar para el público?, pero para qué vamos a trabajar para alguién que nos desprecia y no paga la entrada del boleto... ¿trabajar para nuestros amigos y hacer arte por el arte? way, no lo sé, como que es quedarnos dormidos en nuestros laureles.
Soy de dar concluciones, yo quiero trabajar para la gente... creo que al final de cuentas debemos de trabajar teniendo fe en lo que queremos, darle voz a la gente que tenie algo qe decir, que se identifique con nuestro trabajo.
Pero el deseo de producir y dar a conocer nuestros demonios y fuerzas internas es más fuerte.
Tenemos que buscar entonces nuestro equilibrio entre lo que queremos y entre la sociedad, esa es mi premisa básica para trabaja ahora.
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